Cuando el dolor de cadera afecta a personas jóvenes: pinzamiento femoroacetabular

El síndrome de pinzamiento femoroacetabular, también conocido como choque femoroacetabular, ha captado notable interés en los últimos años debido a su implicación en el dolor de cadera y la osteoartritis en personas jóvenes. Este artículo ofrece una visión detallada sobre las causas, síntomas y tratamientos de este síndrome, ayudando a comprender mejor esta condición que afecta la movilidad y la calidad de vida.

¿Cuál es el origen del pinzamiento femoroacetabular?

El síndrome de pinzamiento femoroacetabular se produce debido a anormalidades en el fémur, el acetábulo o ambos. Estas irregularidades generan un contacto anómalo entre las estructuras de la cadera, lo que lleva a dolor y daño articular. Existen dos tipos principales de este síndrome, dependiendo de la estructura afectada.

Síndrome femoroacetabular tipo CAM

Este tipo se caracteriza por la deformación de la cabeza femoral, que pierde su forma esférica o presenta irregularidades en la unión con el cuello del fémur, aumentando el radio de estas estructuras. Durante la flexión completa de la cadera, la prominencia anómala en la cabeza del fémur entra en contacto con el borde del acetábulo, causando abrasión del cartílago acetabular y daño al labrum, principalmente en la región anterosuperior. Este tipo es más común en hombres jóvenes y activos, entre 20 y 40 años, y está asociado con antecedentes de deslizamiento epifisario femoral, enfermedad de Perthes, osteonecrosis y fracturas mal curadas o no unidas de la cabeza femoral.

Síndrome de pinzamiento femoroacetabular tipo pincer

Conocido también como deformidad en tenaza, este tipo se produce por un sobrecubrimiento de la cabeza femoral por parte del acetábulo, que puede estar más profundo o en retroversión. Esto causa lesiones en el labrum y desgaste del cartílago articular. Es más frecuente en mujeres activas alrededor de los 40 años y puede ocurrir debido a movimientos excesivos de la cadera en personas sin una clara patología acetabular, comúnmente en mujeres jóvenes que practican deportes intensos.

Choque acetabular mixto

Hasta un 86% de los casos de pinzamiento femoroacetabular presentan características combinadas de los tipos CAM y Pincer. Las lesiones suelen localizarse en el cuadrante anterosuperior del acetábulo, donde se produce el mayor impacto entre el fémur y el acetábulo.

Síntomas del síndrome de pinzamiento femoroacetabular

Este síndrome se presenta con mayor frecuencia en mujeres y muchas veces en personas con anatomía femoroacetabular normal. El síntoma principal es el dolor en la parte anterior de la cadera y la región inguinal, que se agrava con periodos prolongados de estar sentado, al bajar de un automóvil, con torsiones internas de la pierna en flexión, al soportar peso y con caminatas largas.

Los pacientes pueden tener dificultades para manipular sus pies o amarrarse los zapatos estando sentados. El dolor puede ser leve durante movimientos continuos, pero se intensifica con actividades que requieren moverse y detenerse o saltar sobre la cadera afectada. El dolor puede irradiarse al muslo anterior o la parte superior del glúteo, y puede haber bloqueo o atrapamiento de la cadera. En casos avanzados con cambios degenerativos, se presenta rigidez y dolor nocturno.

En el tipo CAM, el dolor anterior sugiere patología del labrum y cartílago anterior, mientras que en el tipo Pincer, el dolor se irradia a la región posterior, sugiriendo pinzamiento posteroinferior. La artrografía por resonancia magnética nuclear es el examen preferido para diagnosticar este síndrome, permitiendo una visualización detallada de las lesiones del labrum y el cartílago.

Tratamiento del síndrome de pinzamiento femoroacetabular

El tratamiento inicial suele ser conservador, incluyendo fisioterapia, modificación de actividades para evitar movimientos perjudiciales, uso de antiinflamatorios no esteroideos e inyecciones intraarticulares de corticoides. Si estas medidas no son efectivas, se recurre a la cirugía, cuyo tipo dependerá del grado de artrosis del paciente. Las opciones van desde la artroscopia para lesiones leves, osteoplastia y osteotomía para lesiones moderadas, hasta la artroplastia de cadera para casos graves.

Tratamiento quirúrgico del síndrome de pinzamiento femoroacetabular

La evidencia muestra que los resultados quirúrgicos son mejores cuando las lesiones del cartílago no están avanzadas. Los resultados dependen del estado clínico de las lesiones y del estado general del paciente. Las modificaciones en la actividad física, el uso de antiinflamatorios y la cirugía buscan mejorar al máximo la condición del paciente. Los mejores candidatos para la cirugía son aquellos con rangos de movimiento cercanos a los normales, con identificación clara del origen del pinzamiento y sin adelgazamiento significativo del cartílago en las radiografías.

Dos meses después de la cirugía, los pacientes pueden caminar sin asistencia con un entrenamiento adecuado. Al final del tercer mes, pueden regresar a actividades físicas leves, mientras que deben evitar actividades que impliquen torsión y pivoteo sobre la cadera afectada durante los primeros cinco meses.

Conclusión

El síndrome de pinzamiento femoroacetabular es una condición que afecta a personas jóvenes y activas, causando dolor y limitación de la movilidad de la cadera. Con un diagnóstico adecuado y un tratamiento oportuno, ya sea conservador o quirúrgico, es posible mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes. La combinación de modificaciones en el estilo de vida, fisioterapia y, cuando sea necesario, intervenciones quirúrgicas, permite abordar eficazmente esta condición, promoviendo una recuperación funcional y aliviando el dolor asociado.

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