Hola. Los vómitos en los lactantes pueden ser por múltiples causas. Entre las más frecuentes se encuentra el reflujo gastroesofágico, debido a inmadurez del tubo digestivo que permite el paso de alimento desde el estómago al esófago. El reflujo gastroesofágico mejora y acaba desapareciendo con el crecimiento del bebé a medida que madura su tracto digestivo, cuando inicia la alimentación complementaria ( al espesarse su alimentación) y al estar más tiempo sentados. Cuando las regurgitaciones afectan a la ganancia ponderoestatural del bebé hablamos de enfermedad de reflujo gastroesofágico y en este caso debe ser valorado por un médico Pediatra especialista en Digestivo para su tratamiento. La enfermedad por reflujo gastroesofágico puede causar esofagitis y producir el rechazo de tomas y el arqueamiento del bebé que refiere, pudiendo requerir tratamiento farmacológico. Realice medidas posturales, no acostando al bebé recién tomado y colocando el cabecero de su cuna a 30º semiincorporado. También puede probar a realizar tomas más frecuentes para que ingiera menores cantidades. Otro diagnóstico posible a esta edad es la alergia a proteína de leche de vaca, sobre todo si los vómitos afectan al crecimiento del bebé, y para el diagnóstico se requiere valoración analítica y comprobar la mejoría clínica tras la supresión de la proteína de leche de vaca en la dieta de la madre. Debe consultar a un médico en persona para valorar al bebé y confirmar que los vómitos no afectan a la ganancia de peso y talla del bebé. De igual forma, en caso de vómitos proyectivos que vayan en aumento, mal estado general, distensión abdominal, pausas de respiración o decaimiento debe ser valorado en persona. Un saludo. Dra. Martín Bahamontes