La blefaroplastia es una cirugía que tiene como objetivo corregir el exceso de piel en los párpados, ya que con el envejecimiento, los párpados se estiran y los músculos que los sostienen se debilitan.
Mediante esta intervención en los párpados, bolsas y cantos oculares se elimina y reacomoda el exceso de piel, se tensa el músculo de los párpados, tanto inferiores como superiores, y se extrae la grasa localizada para eliminar las bolsas que se forman alrededor de los ojos.
La blefaroplastia se suele realizar de forma ambulatoria. El cirujano inyecta un medicamento para anestesiar los párpados y otro por vía intravenosa para ayudar a que el paciente se relaje.
La blefaroplastia superior se realiza a través de una incisión mínima que no deja cicatriz visible, ya que queda oculta en el pliegue natural de los párpados superiores. Se elimina la piel y la grasa sobrante en esa zona causada por el envejecimiento.
La blefaroplastia inferior elimina las bolsas de los ojos y que en algunos casos puede incluso mejorar los surcos de las ojeras. Puede puede realizarse por vía externa o por vía interna. La primera se lleva a cabo un pequeño corte bajo las pestañas a través del cual se extraen las bolsas de grasa y se sella por una sutura muy fina que facilita tensar la piel.
La interna se realiza una pequeña incisión en la parte interior del párpado, sin tener herida externa, por donde se extrae la grasa mediante la mucosa interna que tiene el párpado.
Los hematomas y la inflamación suelen disminuir en un periodo de 10 a 14 días.
