La urticaria colinérgica es una reacción en la piel caracterizada por la aparición de pequeñas ronchas (habones) casi siempre en la parte superior del tórax. Esta enfermedad está ligada a los aumentos de temperatura corporal, y el ejercicio es por ello uno de los desencadenantes. No obstante, también hay otras causas como el agua caliente, el sudor y el estrés. Comúnmente se ha conocido a la urticaria colinérgica como la ‘alergia’ al ejercicio físico.
Esta patología se estudia dentro de la especialidad médica de Dermatología.
Suele afectar a jóvenes adultos. Los pacientes presentan habones a los 5 minutos aproximadamente de un ejercicio intenso, calor o situación de estrés, preferentemente en región superior del tronco, cuello y miembros superiores. La erupción suele remitir espontáneamente al cabo de los 20-60 minutos.
Estas pequeñas ronchas pican mucho y suelen ser de diminuto tamaño, a diferencia de las urticarias normales donde las ronchas son mucho más grandes. En algunos pocos casos estos se acompañan de broncoespasmo; no obstante, esto puede ser debido a una asociación de urticaria colinérgica con asma inducido por el ejercicio.
Este tipo de alergia se puede controlar con tratamiento con un antihistamínico media hora antes del ejercicio o de lo que desencadene la urticaria colinérgica. También es importante realizar un buen calentamiento progresivo para adecuar el cuerpo al cambio de temperatura.
Los casos severos de urticaria colinérgica se tratan de manera similar a los shocks anafilácticos, cuando se ve comprometida la función respiratoria. Por suerte, estos casos son muy extraños.
En general, para casos leves y moderados se prescriben antihistamínicos por vía oral, que pueden reforzarse con alguna pomada con corticoides si los habones tienden a permanecer más tiempo del habitual o el paciente no tolera el prurito, por ejemplo en caso de niños pequeños.